Debe ser tremendo la situación de una madre gestante con tal conflicto interno. Pero esa situación también va con el padre. Y la relación del padre con la madre es esencial para resolver y evitar esa tremenda situación.
Siendo esencial, nadie como el padre puede evitar (dejando de provocar) el crimen.
Siendo esencial, nadie como el padre es autor y culpable del crimen.
Éste es el primer y, por tanto, el más grave escándalo:
que el padre provoque que la madre entre en tal conflicto.
No hay comentarios:
Publicar un comentario